Luego de los distintos protocolos para despedir y conmemorar su figura, esta semana, en una notaría de Milán se abrieron los documentos escritos de puño y letra por el diseñador.
Finalmente, se conoció el testamento de Giorgo Armani, donde especifica sus deseos para preservar la marca. En ese sentido, también cabe destacar que, al no tener hijos ni herederos forzoso, pudo disponer con libertad de su fortuna.
En las últimas horas, comenzó el proceso de sucesión de un imperio valuado en 12.000.000.000 de euros. Entre el legado, se encuentran obras de arte, propiedades, yates, una participación en el grupo óptico EssilorLuxottica, el club de básquet Olimpia Milano y, sobre todo, el 99,9% de las acciones de Giorgio Armani S.p.A.
Según se pudo saber, los testamentos oficializan el traspaso del control de la empresa de la Fundación Giorgio Armani, creada en 2016 con el objetivo de preservar el legado del diseñador y garantizar la independencia de la firma.
En el Consejo de administración de la Fundación ya están sentados los sobrinos de Armani, considerados sus herederos más directos. La dirección quedó en manos de Pantaleo Dell’Orco (su mano derecha y pareja), su sobrino Luca Camerana y el ejecutivo Irving Bellotti de Rothschild Italia. También se destaca la presencia de Silvana Armani, una de sus sobrinas más cercanas.
Por último, vale destacar que la firma celebró en julio sus 50 años de historia, al consolidarse como una de las pocas casas de moda que supo equilibrar la creatividad con el liderazgo empresarial. Mientras tanto, otras fueron absorbidas por grandes conglomerados internacionales.
