El sexo salvaje definitivamente es para todos. Sí, seguramente no es para practicarlo todo el tiempo ya que muchas veces lo que buscamos es un poco de romance, conexión e intimidad, pero si vos y tu pareja quieren salir un poco de la rutina y disfrutar del sexo rudo, apasionado y salvaje, en esta nota te dejamos 10 tips para que pongas en práctica y vivan una nueva y excitante experiencia.

Centrarse por completo.
Un estudio firmado por la University de Virginia, en Estados Unidos y publicado en la revista Psichology Today señala que para lograr una noche especial y llena de pasión es preciso que ambos en la pareja estén completamente enfocados y concentrados en el encuentro.

Vestirse de forma provocativa.
Aunque no lo creas, en una relación de pareja lo visual es crucial para iniciar un encuentro erótico, y para excitar a la pareja aún más, es recomendable preparar tu ropa interior más sexy para dicho momento y lucir una melena rebelde y sexy. Excita a tu pareja sin tener que ponerle un dedo encima.

Dirty Talk.
Si quieres tener sexo rudo, debes hablar de forma atrevida. Enciende la llama con frases sexys y un poco rudas sin tener que involucrar malas palabras, sólo provoca a tu pareja y pedile que te haga cosas que nunca antes han intentado. Dejale saber cuánto lo/a deseas.

Usar las manos, y aún mejor, las uñas.
Toca y masajea todo su cuerpo, pero sobre todo enfocate en su espalda y deja que tu pareja se enfoque en tus glúteos. Sosténganse fuertemente y trata de acariciar con pequeñas presiones y rasguños por todos su cuerpo sin llegar a lastimarlo. Detenerse por un momento en las zonas erógenas.

Acariciar su cabello.
Tomar a tu pareja de su cabeza y mover rascar suavemente su cuero cabelludo cuando tengan relaciones sexuales. Esto genera un poco más de intimidad y hará que el sudor de su frente luzca aún más sexy.

Dar indicaciones.
Tu pareja no lee la mente, entonces si quieres algo habrá que pedírselo. Hacerlo de la manera más sexy, con susurros y pidiendo que haga más de lo que está haciendo. A tu pareja le gustará que controles la situación y también le excitará ver que disfrutas del sexo.

Aprovechar el sudor.
El sudor es lo más sexy que hay, no estoy hablando del sudor que mancha tu ropa, sino del sudor que corre por sus cuerpos desnudos con el roce. Que no te de repugnancia y disfruta de lo erótico que ofrece una piel húmeda en contacto con la suya.


Ojos vendados y manos amarradas.
Denle un giro a la experiencia y hagan cosas que no hacen regularmente como sujetar sus manos o vendar sus ojos. De esta forma tendrán más activo su sentido del oído, gusto y olfato, y podrán ponerse un poco más picantes.

Intentar con posiciones sexuales que dominen.
Aunque no lo creas, es más fácil disfrutar de sexo salvaje con posiciones que ya dominas como vaquerita o misionero, además de que no perderás esa intimidad con tu pareja. Si intentas posiciones nuevas puede ser que tengas que comenzar despacio y aunque lógicamente lo disfrutarás, puedes perder un poco el lado erótico. Te recomiendo: misionero, vaquerita, vaquerita de reversa, cucharita, perrito, piernas arriba en el borde de la cama y él de pie o flor de loto.

Sentido del humor. Otra clave para que los encuentros se torne algo picantes y salvajes es tener sentido del humor. Justo en este punto la química entre la pareja juega un papel crucial. El juego, la diversión y la risa ayudarán a subir el placer a lo más alto.