El dirigente explicó que “la suba de los insumos con el cual se alimenta el cerdo, como el maíz; el aumento de la electricidad; la caída del poder adquisitivo, ya que nosotros producimos para el mercado interno. Y un elemento fundamental, que es la apertura de las importaciones de cerdo desde Brasil. Todo esto ha hecho que la situación sea terminal para los pequeños y medianos productores”.

“Estamos en una situación crítica” por lo que “están desapareciendo criaderos de cerdo dos o tres por semana”, aseguró en diálogo con Radio Rebelde.

En este marco, Paillole sostuvo que “si el Gobierno no toma ninguna medida, no habrá segundo semestre para el productor porcino. Nos venimos reuniendo desde el mes de febrero. Ellos tenían que definir el modelo agropecuario que querían: si era de producción, de commodities a través de pools de siembra o si era el del valor agregado y la diversificación de la producción. Ante esa pregunta ellos no tienen respuesta”.

“Abren indiscriminadamente las importaciones particularmente de Brasil y Dinamarca que en nuestra zona hace desastres. Y eso sólo en la actividad porcina. Pasa en los muebles, en los calzados, en todo. Hay una invasión. Lo que estamos viviendo en los últimos meses es una gran caída del empleo y una paralización de los pueblos del interior”, añadió.